Chara
apareció por el campo aterrada, delgada y con muchos parásitos, no fue
fácil cogerla, incluso intentaba morder cuando ibas a tocarla. Ha
necesitado mucho tiempo para confiar y comprender que no se le va a
hacer más daño, gracias a la casa de acogida ella ha avanzado en su
confianza y tranquilidad.
Es una
perrita tranquila y obediente cuando tiene confianza, necesita una
familia donde haya otros perros, se siente mejor cuando hay otros
animales con ella.
Al quedarse sola
en algún momento tiende a querer ir detrás de los demás y rompe cosas
para poder huir, todavía necesita algo más de tiempo para estar
completamente estable, pero ha cogido un vínculo con sus humanos de
acogida y sigue sus pasos. Por eso
ahora es buen momento para encontrar una familia definitiva y obtenga la
confianza necesaria para una buena convivencia en un hogar definitivo.
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